¿Es la solución dejar de comer pescado?
Las críticas al documental de Netflix «Seaspiracy» no paran de crecer y, honestamente, espero que no aumente el número de seguidores que apoya la idea de reducir la ingesta de pescado.
En este sentido estamos de acuerdo con la posición de CONXEMAR (Newsletter del 11/05/21) donde señalan que este documental pone en peligro la industria pesquera mundial por conductas que, sin duda, son reprochables, como en el caso de algunos actores que, inescrupulosos, atentan contra el medio ambiente y se apoyan en la explotación de trabajadores (mano de obra ”barata”) para ver incrementados sus beneficios.
Desde Pescafácil estamos de acuerdo en que nuestros océanos están en peligro por culpa de varios factores, entre ellos la sobrepesca. Según el informe de la FAO “El Estado Mundial de la Pesca y la Acuicultura“, el 33% de las poblaciones de peces marinos están sobreexplotadas y se enfrentan a un futuro insostenible.
Este dato es mucho más preocupante en el Mar Mediterráneo, donde la sobreexplotación pesquera alcanza el 78%, por lo que apoyamos la implantación de medidas y restricciones que tengan como objetivo detener la pesca destructiva. Una pesca sostenible es posible con las regulaciones debidas, siempre y cuando estén apoyadas en datos científicos.
La contaminación de los océanos es otro problema que se debe abordar con seriedad. Las redes, plásticos y otros tipos de residuos, perjudican la vida marina, hasta el punto de poner en peligro a especies enteras.
La justificación utilizada por algunas instituciones donde es necesaria la explotación pesquera para alimentar a miles de millones de personas, no nos vale, porque poner en peligro los ecosistemas comprometen la supervivencia de las futuras generaciones.
La acuicultura, por ejemplo, cumpliendo con las normativas ambientales exigidas por la certificadoras internacionales, garantizan alimentos sanos y sostenibles a bajo costo, para miles de millones de personas.
Para concluir, pensamos que este documental sirve para crear conciencia, sin embargo, la pesca sostenible que todos queremos es posible sin necesidad de promover la idea de dejar comer pescado. Como decía el oceanógrafo y gran defensor de los mares y los océanos, Jacques Cousteau, si muere el océano, morimos nosotros y estamos a punto de hacerlo, en realidad. Pero podemos prevenirlo.